LA MINERÍA Y EL GOBIERNO COMPRAN VOLUNTADES Y CALLA CONCIENCIAS, NO LO PODEMOS NEGAR
Por Semanario La Séptima -
DESNUDA ENTREVISTA AL MILITANTE ECOLOGISTA JAVIER RODRÍGUEZ PARDO
Los embates que el gobierno sanjuanino viene deslizando contra ambientalistas y opositores de la gran minería metalífera motivaron esta entrevista a Javier Rodríguez Pardo. El cuestionario nos permite indagar en la actividad de quien hoy es uno de los principales referentes de la lucha contra la mega minería metalífera y blanco de mordaces críticas del oficialismo. Funcionarios locales como desde las transnacionales mineras, lo sindican de fundamentalista de la ecología aplicando apelativos más desconcertantes y descabellados aún, el de terrorista. Rodríguez Pardo es columnista de esta revista. En mayo del año pasado sus exposiciones públicas en San Juan produjeron una apertura al debate de la minería química en esta región cuyana, definición que acuñó para explicar el método extractivo de la gran minería. La Séptima ha reflejado buena parte de su militancia en nuestra provincia, su activismo ecologista y sus investigaciones. Pero es preocupante que desde el gobierno provincial se cercenen libertades y se avance sobre los privilegios naturales de las personas, impidiéndoles practicar el derecho constitucional de plebiscitar este tipo de minería, avasallando su libertad de elegir. En este sentido, también el dirigente ecologista de la Patagonia estaría siendo perseguido y calificado de manera agraviante por funcionarios del gobierno de José Luis Gioja. El reconocimiento y la labor que desempeña es trascendente, en nuestro país e incluso en el extranjero. Muchas páginas de Internet dan cuenta de su actividad y de las expresiones de apoyo que lo acompañan; editan sus textos y sus artículos recorren el mundo en distintos idiomas. Su palabra es escuchada y respetada, por eso las transnacionales mineras lo consideran peligroso. El activo ecologista chubutense, nos hizo advertir que “el método minero creado por las transnacionales es perverso y se debe a la baja ley de los minerales que deberán extraerse de manera rentable”.
LS: -¿A qué se debe que Marcelo Ghiglione, funcionario del área de la Subsecretaría de Minería de San Juan, lo ataque de terrorista. Es él o el gobierno?
JRP: -La respuesta la debemos buscar en la embajada norteamericana. Es increíble que muy pocos hayamos reparado en la presencia de Richard Miles en San Juan. Es inaudito que este señor se ufane de ser el primer secretario político militar de la embajada de Estados Unidos, responsable de cuatro provincias argentinas: Córdoba, Misiones, Jujuy y San Juan. Cuatro provincias estratégicas que influyen y cubren desde el acuífero guaraní hasta la cordillera cuyana donde se lleva a cabo por primera vez el tratado minero de implementación conjunta argentino-chileno. Su visita de bajo perfil se publicó en los medios. Nadie en su sano juicio puede dejar de pensar en esa relación política. Y es muy grave que me apliquen semejante calificación porque esa es la intención de la política represiva de los agentes del norte, acostumbrarnos a esos ataques, insistir en ello y que cuando ocurra una fuerte represión, justificar la acción eliminando al malo de la película, como si tal cosa. Los agentes de la CIA, como Miles, están acostumbrados a eso. Le cuento que, en nuestras charlas de divulgación, pasamos una película demoledora sobre Ecuador, “Oleoducto, contaminación y pobreza”. La nombro y ya se me pone la piel de gallina con la destrucción que vienen haciendo en la amazonia ecuatorial. Pero lo espeluznante, que viene a mi memoria cuando nos llaman terroristas, es una parte del discurso que hace una militante ambientalista norteamericana en esa película, Julia Butterfly, hace tres años, en el 2002. Ella dice que su país se cree con derecho a derrochar combustible pero no se preguntan por los derechos de los ecuatorianos. Y explica que ahí es cuando debemos mirarnos los norteamericanos, y al ver lo que hacemos, la destrucción que cometemos, comenzar a escribir cartas y a boicotear las compañías. Recuerdo que dice que “hay gente que tiene miedo de decir esto porque en Estados Unidos te pueden enjuiciar. Yo lo digo en alto, lo digo claro, lo digo con orgullo, boicoteemos a las corporaciones que están destruyendo nuestro planeta”. Y luego dice lo increíble: “Cómo se atreven a llamarnos extremistas, radicales, e incluso terroristas. Nos empiezan a llamar terroristas. ¿Cómo se atreven a tratarnos de esa manera, a llamarnos terroristas?, se pregunta Julia Butterffly en el documental sobre Ecuador en el año 2002.
LS: -En agosto del 2005 a Rodríguez Pardo también le dicen terrorista.
JRP: -Es una clara imposición del monarca mundial para generar represión indiscriminadamente como suele hacer. Y para ello cuenta con los locales como el gobernador José Luis Gioja y sus secuaces, a quienes bajan línea los dominadores del globo. Gobernantes, legisladores y hasta miembros de la justicia, todos, reciben igual instrucción de los señores de USA. Mi denuncia en los tribunales sanjuaninos, donde aporté los detalles de las injurias, testigos y una película que tomaron los docentes registrando al ingeniero Marcelo Ghiglione tildarme de terrorista, la extiendo al gobierno porque estaba presente el subsecretario de minería de la provincia, Felipe Saavedra, y no evitó la reiteración de ese discurso. Igual ocurrió en Calingasta, donde la misma persona acompañada por el director de minería de la provincia, ingeniero Bustamante, me señala con el dedo y me grita “usted es un terrorista ecológico”, ante la sorpresa de un auditorio que terminó echándolos del lugar. Primero fui terrorista ecológico, ahora directamente terrorista.
LS: -¿También le pincharon el teléfono y antes un hacker le robó el correo?.
JRP: -Sí, en la misma causa ratifiqué la denuncia; lo de mi celular lo descubrimos por casualidad al no poder ingresar tarjetas ni poder consultarlo. Los técnicos dijeron que la única causa posible es la intervención del teléfono, porque de esa manera se descalibra. En cuanto a lo del robo de mi correo era previsible pues esa gente tiene medios, dinero y todo el tiempo del mundo para poner gente en esa tarea. No le deseo a nadie abrir el correo y leer que desde mi propio correo de Hot-mail me están escribiendo al de Yahoo, con total desparpajo, incluso insultándome. Tamañas violaciones son verdaderas acciones de terrorismo. Ellos son los que siguen ejerciendo terrorismo de estado. ¿Quiénes están a cargo de estas tareas? Cualquiera. Puede ser Barrick, el gobierno, algún servicio, o mercenarios.
LS: -¿Qué ocurrió en Pismanta con personal de seguridad de Barrick Gold?
JRP: -Con un equipo de cineastas documentalistas recorrimos gran parte de San Juan. Es frecuente que los medios nacionales y extranjeros me inviten a documentar imágenes, últimamente nos ocurrió con cineastas chilenos, brasileños y europeos. En esta ocasión la idea no era llegar a Veladero, sino a 80 kilómetros de la planta, cerca del Paso Conconta, y tomar imágenes. Esa ruta la tiene clausurada Barrick y dice -ilegalmente- propiedad privada. Nos paró seguridad de la minera, no gendarmería. Amagaron quitarnos la película porque igual filmamos la discusión con ellos, los carteles y los cerros cercanos, mientras relataba lo que iba ocurriendo con un micrófono debajo de la ropa. Al regresar nos siguió una camioneta de Barrick y, como descubrimos la acción, retorna con más gente y desde unos cien metros comienzan a filmarnos a nosotros. En ese mo-mento yo estaba saliendo al aire por una radio de Mercedes, de la Provincia de Buenos Aires, mientras mis compañeros, cámara en mano, hacían contacto con un neocelandés, miembro de seguridad de Barrick. Barrick le impide el paso a todo el mundo y mantiene un cerco sobre sus propios empleados. Al Dr. Juan Pablo Milana, uno de los pocos geólogos expertos en glaciología, le impidieron subir e investigar los hielos de la reserva de biosfera de San Guillermo, donde Barrick tiene su complejo minero de Veladero y Pascua Lama. Y si le permitieran subir, sólo podrá hacerlo sin equipos que registren imágenes y circular por donde le indiquen. La denuncia del Dr. Milana está en los tribunales sanjuaninos.
LS: -En Iglesia un antiguo empleado de Barrick le trasmitió un mensaje.
JRP: -Visto de una manera fue un mensaje de Barrick, porque George Bee, gerente de Barrick Gold se dirige a su ex empleado, Fredy Espejo, y le dice que “se portaron muy bien con él y que en cambio Espejo fue muy duro con la empresa. Fredy responde ignorando el contenido de las preguntas y el responsable de Barrick remata con: “a usted le hace mucho daño el señor Rodríguez Pardo, ese señor no le conviene”. Fredy Espejo fue el protagonista de una nota publicada en La Séptima con el título ASÍ FUNCIONA BARRIK GOLD, donde cuenta su experiencia laboral en Veladero y los comienzos de Lama. Quien tenga interés en leerla puede recurrir a esta revista, a cualquier página web o en el buscador de Google, por ejemplo. Esa nota recorre el mundo.
LS: -¿Qué planes tiene de aquí en adelante?
JRP: -Mucho no se puede decir porque prevenimos al invasor minero. Pero no ocultamos que llevo realizadas cientos de charlas y que seguiremos por ese camino. Desde el Rotary Club, partidos políticos, hasta las agrupaciones de izquierda pasando por los comités, unidades básicas e instituciones intermedias, han querido conocer nuestra prédica y preocupación por los recursos naturales más preciados. Nos invitan de todos lados, menos del oficialismo giojista. Muchos transversales kirchneristas que vinieron a escucharnos nos expresaron sus temores al respecto. La cordillera va a quedar irreconocible y el agua de San Juan tiene los días contados, si no detienen el daño y el saqueo. En estos casi cuatro meses sólo falté de San Juan unos días, participé en tres foros en Buenos Aires, en charlas en la Facultad de Derecho de la UBA y en la de Lomas de Zamora. Incluso di una conferencia en la Facultad de Derecho de la Policía Federal en José María Moreno y Rivadavia, invitado por la cátedra de medio ambiente. Estuve unos días en Mendoza, en Santiago de Chile y en Valparaíso, invitado por esas comunidades. Barrick Gold Corporation sabe que después de la carta que le entregamos en Santiago de Chile, argentinos y chilenos, ambos pueblos nos encontramos unidos frente a un enemigo común muy fuerte y poderoso, es cierto, pero la defensa del agua, del medio ambiente no es poca cosa y ellos lo saben y por eso temen nuestra unión y también tienen signos de debilidad.
LS: -¿Cuales son esos signos?
JRP: -Se está pudriendo por adentro. Cada vez somos más, adentro y afuera, que nos oponemos al gigante de la globalización. Un gigante que debe aplicar la fuerza para sobrevivir. No se baja del caballo consumista y dilapidador. Su calidad de vida es pésima. Altos índices de drogadicción, los mayores del planeta, alcoholismo y mala alimentación. Las muertes por cáncer y coronarias son alarmantes en Estados Unidos. Ejerce una violencia interior imparable y una política exterior a base de metralla y fuego. Domina los medios de su país y destruye todo tipo de libertades, como la del periodista que debe preservar su fuente de información. Ese sistema de gobierno le miente al mundo y le miente a su propio pueblo. La violencia es un signo de debilidad. Y tildarnos de te-rroristas es sencillamente un signo de temor, de miedo. Nosotros lo único que queremos es de-fender nuestros recursos naturales, los minerales críticos y estratégicos que viene a buscar a precio miserable, dejándonos un pasivo ambiental demoledor, sin agua y la poca que dejará estará contaminada. El 60% de los ríos del oeste norteamericano están contaminados. Hay sitios de Estados Unidos donde cuesta dos veces más una botella de agua mineral que un litro de combustible. Y siguen derrochando. Una familia española de visita en Pensilvania comentaba que les llamó la atención entrar en un edificio donde la calefacción era sofocante, el clima en pleno invierno era irrespirable por el calor, y en lugar de bajar la temperatura o abrir las ventanas, ponían en funcionamiento el aire acondicionado para refrescarse. Es el país del consumo, del derroche. Y lo pagamos en el resto del planeta, material y ambientalmente hablando, con el calentamiento global. Aquí es donde debemos cerrarles las puertas e impedirles que vengan a buscar minerales de ley cada vez más baja. Los del norte son el 20 % de la población mundial y consumen el 80 % de la energía del planeta. Debemos impedir esto. Urge ponerse de pie y frenar a Goliat. Antes exigíamos equidad, ahora debemos plantarnos y decirles que se arreglen con lo que tengan, que se vayan y que nos dejen resolver nuestros problemas, sin extorsiones ni bloqueos económicos. Ellos agotaron sus recursos. Tyrrel Miller dice que es el único país que alcanzó en tan corto tiempo, 200 años, ser primera potencia mundial, pero agotando los recursos propios (y ajenos). Y cla-ro, tiene razón, si cada ciudadano norteamericano consume de promedio diecinueve toneladas de minerales, combustibles o no, por año; ¡diecinueve toneladas cada uno!.
LS: -Nosotros también tenemos enemigos adentro que frenan y ponen palos en la rueda. Y nuestros gobiernos admiran la economía norteamericana.
JRP: -Son dos cuestiones. Barrick compra en Chile a dos o tres de la Comisión de Vigilancia del Valle de Huasco, corrompe a algunos regantes y a funcionarios, aunque los políticos sobornados son muchos. Las mineras corrompen, contratan mercenarios, se comportan como mafias. Y Barrick en el lado argentino hace lo mismo. Reparte dinero, algunas máquinas para los agricultores, computadoras para instituciones y estudiantes. Anuncia repartir 60 millones de dólares entre los valles de las dos cuencas inmediatas a la explotación minera, la del Pacífico y la del Atlántico, pero lo hace ahora para contrarrestar nuestra lucha. Practica el soborno en todos los terrenos, radios, prensa y canales de televisión. Y lo hace con nuestro dinero. Nos extorsionan y sobornan con nuestro propio dinero, ya que las mineras liquidan el paupérrimo royalty con declaraciones juradas. Las explotaciones las inician con créditos donde la garantía es el filón de los yacimientos y el país que ratifica la concesión. Son los yacimientos los que captan accionistas en las bolsas. Y por supuesto, declaraciones juradas falsas, como ocurre en Chile y en Argentina. Ese es el control que hay. El papel aguanta lo que le pongan y los gobiernos, nacional y local, ponen su cuota y sus bolsillos extendiendo la mano. Un circuito mafioso siniestro. La minera y el gobierno compran voluntades y calla conciencias, no lo podemos negar. Algunos compañeros que trabajaban con nosotros, militaban con nosotros, guías de turismo, no podían ejercer su trabajo en la montaña. Ahora no sólo pueden hacerlo sino que tienen empresas de turismo, matrícula, e infraestructura. Nos usaron y luego se vendieron, incluso nos difaman. Pero eso está dentro de lo imaginable. Sabemos que siempre es así.
LS: -También siembran intrigas por correo electrónico, en cadenas de correos. A nuestra redacción llegaron algunas.
JRP: -A algunos los hemos denunciado por injurias, porque hablan por teléfono con personas que nos ayudan y que están con nosotros y les dicen que somos delincuentes, inventan cosas increíbles, como decir que somos de un partido político, o que somos comunistas, o fascistas, que somos justicialistas de los setenta... Inventan lo que convenga según el interlocutor que tengan, generando intrigas, difamando, cosas vergonzosas, groseras, dolorosas. Pero como la mentira tiene patas cortas, los descubrimos y los llevamos a los tribunales; entonces lo mejor es llamarnos terroristas: expresión del gobierno y de sus lacayos quintacolumnistas. Respecto a que nuestros gobiernos admiran la economía norteamericana; digamos que hay por ahora dos argentinas o dos latinoaméricas o dos indoaméricas, me gusta más, y que esa afirmación no es rotunda. Pero sí que nos hacen depender de una economía que nos atrapa con el Fondo Monetario, el Banco Mundial, el ALCA, Organización Mundial de Comercio, etc., y esa dependencia nos lleva a la deuda externa. Y nuestros gobernantes son proclives a la dependencia, encandilados y untados, mientras sueltan un discurso progresista. Basta ver los programas de política y economía por la televisión…
LS: -Presenciamos una charla que dio ante chacareros, que la deuda extorsiona
JRP: -No es novedad para nadie. Nos preguntan a menudo por qué el gobierno nacional de Kirchner apunta a ésta minería y una de las lecturas es que estos gobiernos presionados por Estados Unidos negocian la deuda externa -haciéndonos creer que sacamos ventajas- siempre que permitamos la explotación de nuestros recursos naturales o llevarse la diversidad biológica que hay en los pueblos del sur. El 75 % de la biodiversidad del planeta está en los pueblos del sur. La gente nos pregunta por qué razón Kirchner lo permite y en realidad creo que lo ofrece. Seguimos con el mismo paquete de leyes de Menem, continuamos con la misma política. ¿Cuál es la diferencia? No se bajó ninguna ley menemista, aunque hubo algún avance en los derechos humanos, una imagen populista, tal vez. Pero el fondo es el mismo o peor, y mantiene una política de entrega. Además controla los medios, impide el debate. No respeta al ciudadano y es intolerante. En San Juan, muchas personas colocan al gobernador Gioja como malevo y villano de esta película, el culpable de la entrega, y no quieren ver que es la misma política de estado del gobierno nacional. Gioja y Kirchner son lo mismo. Ambos son títeres del norte. El Tratado Binacional genera un tercer país en la cima de la Cordillera de los Andes, entrega el territorio a las transnacionales, le entrega el territorio al norte, al imperio. Y nadie del gobierno dice lo contrario. Es más, el canciller viaja a Chile para extender protocolos adicionales al tratado y a las mineras. Es decir, el día de mañana Estados Unidos hasta nos puede condonar la deuda externa con tal de dejarles los recursos renovables y no renovables, el agua, el territorio para bases como las paraguayas. Por eso a ellos les conviene que sigamos reconociendo una deuda, recortada, pero impagable. En Esquel lo dijimos el primer día de nuestra lucha contra la minera canadiense Meridian Gold: vienen por el oro, vienen por todo.
LS: -Es común oírle decir “ésta minería”, haciendo hincapié en una en particular.
JRP: -Hablo de la minería química, como la identifico. La mega minería metalífera química. La que viene siendo prohibida en todos los países por donde circulan estas transnacionales, que destruye cuanto ecosistema tiene a su alcance, con compuestos químicos diversos como el cianuro, ácido sulfúrico, litargirio, soda cáustica, nítrico, mercurio, una verdadera sopa química que se potencia en conjunto, lixiviando los minerales, y se multiplica con los drenajes ácidos que se liberan en el medio. Este invento, pulverizando montañas a tajo abierto, es lo más perverso que el ser humano inventó hasta ahora, equivalente en perversidad a las bombas neutrónicas. Y deben hacerlo de esta manera por el bajo costo y por tratarse de minerales de baja ley. Esto es, minerales diseminados en escasa concentración que, donde no alcanza el ojo humano, como repetimos siempre, se llega con el destructivo cóctel químico. Por donde vamos lo explicamos bien: en 1900 Estados Unidos obtenía cobre de 5% de ley y ahora debe ir a buscar cobre de 0,4 de ley. Con todos los minerales pasa lo mismo. Ellos tienen renio en una o dos partes por millón en sus suelos y nosotros, en Chubut por ejemplo, entre diez y veinte partes por millón. Podemos dar muchos ejemplos. Pero digo ésta minería, porque nos quieren poner en la vereda de la antiminería. Por eso suelo comenzar algunas disertaciones explicando que los anteojos que tengo puestos y el lugar donde damos la charla, provienen de la minería. Inmediatamente hablamos de qué es desarrollo sostenible, consumismo, y el flagelo al que nos someten.
LS: -Es posible que la gente que no está al tanto de este tema, no alcance a visualizar el daño de este método extractivo al que usted alude.
JRP: -Pasamos una película de Sudáfrica donde se muestra a la población negra rascando la tierra para obtener medio balde de agua. Los habitantes de Sudáfrica se quedaron sin agua. No hay. La agotaron las empresas mineras y el irracional consumo de trasnacionales agrícolas. Falta agua en el planeta, y esta minería se encargará de consumir la poca que queda. Pero el daño es en todos los niveles. Inmensas voladuras y movimientos de suelos destruyen nacientes de ríos y acuíferos. Hay una mina de cobre, oro, plata y molibdeno a cielo abierto en Bingham, Utah, que es el mayor ejemplo de destrucción y codicia del ser humano, considerada hasta hace poco el mayor agujero del mundo hecho por el hombre, supera los cuatro kilómetros de diámetro por uno de profundidad. Pero ahora se hacen enormes piletones de más de seis kilómetros, por cuatro de profundidad y dos de ancho, intentando atajar los drenajes ácidos con una ridícula membrana plástica. Una membrana plástica en la tierra de los sismos. Desaparece toda geografía conocida y si a esto le sumamos que no se hace remediación o restitución porque en la mayoría de lo casos es imposible, el daño escapa a nuestro raciocinio. Donde se puede hacer remediación, tampoco se practica. Las minas superficiales abandonadas y sin restaurar de metales y carbón en Estados Unidos superan los 90.000 kilómetros cuadrados. Se cubriría el estado de Indiana. Y no incluyo en el dato las minas habituales, de canteras, pórfidos, etc. que es mucho mayor. Y nos vienen a decir que en el primer mundo se respetan las leyes. Son una manga de hipócritas. Decirles desvergonzados es poco, pero esto ocurre en todo el planeta. Y nosotros en la Cordillera de los Andes, menos lo podemos aceptar, porque allí están las nacientes de nuestra agua, ríos, arroyos, vertientes subterráneas, glaciares, que dan vida a las dos cuencas, la del Pacífico y la del Atlántico. Debemos oponernos con uñas y dientes. Debemos oponernos, por nosotros y por nuestra descendencia, por el futuro del planeta. Hay que tener un poco de dignidad. ¡Qué caramba!
LS: -¿Quién le paga a Rodríguez Pardo, quién cubre los gastos de tanta actividad?
JRP: -La pregunta inevitable ¿verdad? Creo que a vosotros, los de esta revista, al principio se los conté. Durante mucho tiempo tuve una pequeña empresa familiar en Trelew, en mi querido Chubut, un bazar, y de eso íbamos viviendo y costeábamos nuestra actividad antinuclear, o peleando por los bosques nativos de la cordillera y en cuanta actividad ecológica nos requerían. Después decidí afrontar plenamente esta lucha, y volví a ejercer el periodismo, cosa que hice tiempo atrás, fui profesor de periodismo y director y profesor de una escuela de cinematografía. Fue reemplazar el profesorado que es algo que me apasiona por conferencias, disertaciones y cursillos de ecología social, que suelo dar, charlas y debates sobre estos temas. Pero con un par de notas por mes puedo mantenerme y además soy austero y mis movimientos son aportes de la gente del lugar. En Calingasta, estuve en la casa de un productor agrícola. En la ciudad de San Juan, mucha gente amiga me ofrecer su vivienda y ayuda. En primer término debo nombrar a la familia de “Yoyi” Orozco, sin que los demás se enojen, por favor, como la amabilidad de los González, los Cavalier, Rodríguez, Yanzon, Baistrocchi, Mó, etc. Para los viajes colabora la Federación de Viñateros y Productores Agropecuarios, entidad cuyas personas están sumamente alarmadas por sus economías tradicionales. Muchísima gente colabora, porque en realidad se trata de difundir qué está pasando y por qué la lucha por los recursos naturales, e Internet salva las distancias y es de gran ayuda. Son muchos los concejales e intendentes que nos invitan a disertar. En Mendoza por ejemplo es importante la conciencia que se ha tomado. Un buen amigo chileno que me invitó a librar batalla en su país, César Padilla, me decía que yo soy “todo terreno”, porque circulo con viáticos, con lo que haya a mano y me comparaba con otros doctos y académicos. En Mendoza me querían pagar honorarios y les dije que yo no cobro por esta actividad; el hombre se quedó perplejo, mirándome en silencio y yo prefiero eso a que me miren de otra manera. Entonces soy libre y nadie me puede decir nada. En Europa me pagaron conferencias que di, como si ya estuviera estipulado que eso es así. Allí es común y suele haber avidez por estos temas, sobre todo acerca de la Patagonia. Pero mi actividad está en estas latitu-des y prefiero no cobrar por ello. Trabajé medio año en el Congreso Nacional de asesor de un diputado en la Comisión de Recursos Naturales y Ambiente Humano, y fue para desgracia. Peor el remedio que la enfermedad decía mi abuela. Si me pagan una nota periodística, bien y si debo aceptar la solidaridad de mis compañeros y de las comunidades, mejor aún. Donde comen dos, comen tres, y espero que sea siempre así. Es lo que no entienden nuestros detractores, que tanta gente nos ayude de esta forma.
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